El amor perdido sigue siendo amor, Eddie. Adquiere una forma diferente, eso es todo. No puedes ver la sonrisa de esa persona o llevarle comida o acariciarle el pelo o dar vueltas con ella en una pista de baile, pero cuando esos sentidos se debilitan, se fortalecen otros. La memoria. La memoria se convierte en tu compañera. Uno la alimenta, y se aferra a ella, y baila con ella.
Buenas tardes, os dejo un pedacito de texto de una novela que acabo de empezar, pero que tiene muy buena pinta. Del escritor Mitch Albom, más conocido por su obra "Martes con mi viejo profesor".
Espero que os guste, ya iré comentando que me parece.
Un abrazo y feliz puente.
Raquel Jimben